miércoles, 17 de julio de 2013

Las drogas en el universo audio-visual







  Queridas y no tan queridos lectores, rompo mi 'cuaresma analfabeta' para acabar con las insubordinaciones del patán que tenemos como SUBdirector en esta asociación. Pese a su incompetencia y aunque cueste creerlo, Flanagan es mi musa en este artículo, mi fuente de inspiración. Como ya habréis deducido, pequeños cabrones, este artículo trata sobre las drogas.


  A lo largo de la historia audio-visual las drogas, empezando en los amados 60, se han abierto un gran hueco a base de codazos en la música y el cine. Me gustaría comentar algunas películas, canciones, discos, eventos, relacionados con ellas

  Empecemos por la música. El gran evento de música y drogas de la historia, donde los acordes del rock, el alcohol, el sexo desenfrenado, la ira juvenil, inconformista y  un movimiento, que parece que hoy algunos intentan resucitar sin tener ni la más mínima idea de qué era (sí, vosotros, falsos hippies, dais más asco que Self Portrait), el sudor, la suciedad, la hierba: Woodstock. El festival más famoso de la historia, y sin duda uno de los más grandes, se celebró del 15 al 18 de agosto de 1969. En él participaros Joan Baez, The Band, Jimmy Hendrix, Johnny Winter, Creedence Clearwater Revival, Janis Joplin, entre muchos otros. Sin duda se echó en falta la presencia de Bob Dylan, que estaba en la isla de White dando un concierto a cambio de una millonada. Si el genio de Minnesota llega a acudir a Woodstock, la cifra de asistentes habría sido superior.

  Ahora pasemos a algunas película. Trainspotting, protagonizada por Ewan McGregor en la que la heroína, la droga suprema, es el centro de la vida de los personajes, ya sea para consumirla o evitarla. De las mejores películas sobre estupefacientes.  
  Más relacionado con el contrabando, tenemos Blow, protagonizada por un camaleónico Johnny Depp. Inspirada en una historia real, nos muestra como se introdujo la cocaína (blanca, farlopa, mandanga, polvo de ángel, perico, yuya) en EEUU. Además cuenta con grandes canciones en su banda sonora.


  Ambas son películas muy recomendables, si no sabes que hacer hoy, ya tienes plan.

  Para acabar me gustaría comentar algunas canciones. La primera es una de las canciones más representativas y conocidas en el abanico que nos acupa: Lucy in the sky with diamonds. Esta canción de The Beatles, surrealista como pocas, nos transporta a una tierra lejana. En ella trataron de plasmar la sensación, el 'viaje' que proporciona el LSD, por ello el título de la canción (Lucy in the Sky with Diamonds).
  Muy relacionadas con el LSD tenemos dos canciones de Dylan. Rainy Day Women, en la que nos incita a colocarnos, y Sitting on a barbed wire fence donde los marcados compases, los confusos versos y el repetido riff, nos muestran lo más psicodélico de Bobby.

  Un pequeño vistazo a las exquisiteces que han nacido gracias a las drogas, un pequeño vistazo en el que olvidamos e ignoramos a cientos, a miles, de directores, actores, músicos, poetas, eventos, que merecen ser nombrados.
 
 


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